miércoles, 25 de junio de 2008

¿ME LA COMO O ME LA COMO?

Pues eso, las cosas de mi brujilla.

Hace un tiempo que se le empieza a entender casi todo lo que habla... y canta. Porque para que voy a negarlo, Paula se levanta cantando y se acuesta cantando. y, entre medias ¡¡¡canta también!!! Es una alegría continua.

Además del deleite de armónicos, tengo las satisfacciones de sus actos. Por ejemplo, el otro día bajábamos en el ascensor y nos pusimos a ver nuestros reflejos. Ella tan contenta identificando a los presentes, Paula, mamá y... ¿por qué hace papá muecas? total, que se gira y muy seria mira a su padre y le dice “¿Qué haches?”

Otro día, por la mañana, cuando tenia que vestirla y ella no estaba por la labor. ¡¡¡Es mucho más divertido jugar y corretear por la cama!!! Al final le pregunto, como siempre, Paula ¿te visto hija? Y ella me dice ¡No! y se quiere bajar de la cama. Como todavía no habíamos entrado en esta agotadora ola de calor, le comento que no puede andar descalza por la casa. Ella coge los zapatos y se sienta delante de mí para que se los ponga. Una vez le he puesto el primero, gira su cabecita, me mira y me dice “gasias”.

Seguro que vosotros tendréis cosas más interesantes o impresionantes que contar... pero ella es mi “gordita - brujita” favorita, comprensible, y comparto con vosotros nuestras historias.

Por cierto ... ¡¡¡Nos vamos a la playa!!!



Viñeta obtenida de "El País digital" del día 24 de Junio de 2008

sábado, 14 de junio de 2008

ESOS LOCOS BAJITOS

A vueltas con Serrat.

Ya dije en mi primera entrada que me encanta Serrat. creo que hay situaciones de la vida que las describe como nadie. Este es el caso de la siguiente canción:

"Esos Locos Bajitos"

A menudo los hijos se nos parecen,
así nos dan la primera satisfacción;
esos que se menean con nuestros gestos,
echando mano a cuanto hay a su alrededor.

Esos locos bajitos que se incorporan
con los ojos abiertos de par en par,
sin respeto al horario ni a las costumbres
y a los que, por su bien, hay que domesticar.

Niño,
deja ya de joder con la pelota.
Niño, que eso no se dic,
que eso no se hace,
que eso no se toca.

Cargan con nuestros dioses y nuestro idioma,
nuestros rencores y nuestro porvenir.
Por eso nos parece que son de goma
y que les bastan nuestros cuentos
para dormir.

Nos empeñamos en dirigir sus vidas
sin saber el oficio y sin vocación.
Les vamos transmitiendo nuestras frustaciones
con la leche templada
y en cada canción.

Niño,
deja ya de joder con la pelota.
Niño, que eso no se dice,
que eso no se hace,
que eso no se toca.

Nada ni nadie puede impedir que sufran,
que las agujas avancen en el reloj,
que decidan por ellos, que se equivoquen,
que crezcan y que un día
nos digan adiós.



No sé si lo conseguiré, pero espero y quiero educar a mi hija para "SER". Para ser ella misma, para que persiga sus propios sueños y defienda sus propias ideas. Espero que no me importe su porvenir, solo su felicidad. Si ella es feliz es porque todo está bien. Que sufra solo por aquellas cosas de las que no soy responsable y que ,efectivamente, tome sus propias decisiones. Se equivoque o no, porque quiero que mi hija sea dueña de su vida y pueda decir que su madre estuvo allí, apoyándola en todo, estuviera de acuerdo o no. Sé que es dificil, que en muchos casos tendré que recorrer lo andado y reconocer que me equivoqué. Pero ese es mi sueño y lucharé para conseguirlo. Sé que mi mejor maestra y la que me indicará el camino es ella... espero no estar ciega y sorda y ver claramente sus señales.